jueves, febrero 21, 2008

EL ARBOL DELA AMISTAD



EL ARBOL DE LA AMISTAD

Existen personas en nuestras vidas que nos hacen
felices. Por la simple casualidad de haberse cruzado en
nuestro camino.
Algunos recorren el camino a nuestro lado, viendo
muchas lunas pasar, mas otras apenas vemos entre un
paso y otro. A todas ellas llamamos AMIGOS y hay muchas
clases de ellos.

Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza a uno de
nuestros amigos. El primero que nace del brote es
nuestro AMIGO PAPÁ y nuestra AMIGA MAMÁ. Nos muestran
lo que es la vida.

Después vienen los AMIGOS HERMANOS, con quienes
dividimos nuestro espacio para que puedan florecer como
nosotros.
Pasamos a conocer a toda la familia de hojas, quienes
respetamos y deseamos
el bien.

Mas el destino nos presenta a OTROS AMIGOS, los cuales
no sabíamos que irían a cruzarse en nuestro camino.

A muchos de ellos denominamos AMIGOS DEL ALMA, de
razón. Son sinceros, son verdaderos. Saben cuando no
estamos bien, saben lo que nos hace feliz.

Y a veces uno de esos amigos del alma estalla en
nuestro corazón y entonces es llamado un AMIGO
ENAMORADO. Ese da brillo a nuestros ojos, música a
nuestros labios, saltos a nuestros pies.

Más también hay de aquellos amigos por un tiempo, tal
vez unas vacaciones o unos días o unas horas. Ellos
acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro
rostro, durante el tiempo que estamos cerca.

Hablando de cerca, no podemos olvidar a los AMIGOS
DISTANTES, aquellos que están en las puntas de las
ramas y que cuando el viento sopla siempre aparecen
entre una hoja u otra.

El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y
perdemos algunas de nuestras hojas, algunas nacen en
otro verano y otras permanecen por muchas estaciones.

Pero lo que nos deja más felices es que las que cayeron
continúan cerca, alimentando nuestra raíz con alegría.
Son recuerdos de momentos maravillosos de cuando se
cruzaron en nuestro camino.

TE DESEO A TI, hoja de mi árbol, PAZ, AMOR, SALUD y
PROSPERIDAD...

Hoy y siempre... Simplemente porque cada persona que
pasa en nuestra vida es única.
SIEMPRE DEJA UN POCO DE SÍ Y SE LLEVA UN POCO DE
NOSOTROS.

Habrá los que se llevarán mucho, pero no habrá de los
que no nos dejarán nada. Esta es la mayor
responsabilidad de nuestra vida y la prueba evidente de
que dos almas NO sé encuentran por casualidad."