
SUSURROS DE DIOS
UN HOMBRE SUSURRO: “DIOS HABLAME”
Y entonces cantó un pajarito.
Pero el hombre no escucho.
Entonces el hombre gritó: "Dios, háblame", y entonces
se oyeron truenos a través de un colchón de nubes.
Pero de nuevo el hombre no escuchó...
El hombre miró a su alrededor y dijo: "Dios, déjame verte"
Y una estrella brilló en el firmamento como nunca había
brillado. Pero el hombre no miró al cielo y no la vio...
Entonces el hombre indignado fuertemente gritó:
"Dios, déjame ver un milagro" ¡Y nació su hijo!
Pero el hombre no se dio cuenta de la nueva e
irrepetible vida que comenzaba...
Entonces gritó desesperado:
"Dios, tócame, déjame sentirte"
En ese momento, Dios bajó del cielo y
tocó al hombre en su mejilla suavemente. .
Pero el hombre quitó la linda mariposa
de su mejilla y siguió su camino.
Esto nos debe recordar
que Dios siempre está a nuestro lado,
en todo, en lo grande y lo sencillo,
al igual que en cosas a las que no
le prestamos mucha atención.
Inclusive en nuestra era electrónica.
Por eso el hombre, cuando llorando gritó:
"Dios, necesito tu ayuda", en ese momento
le llegó un mensaje de correo electrónico
con buenas noticias, dándole aliento, y
con la oración y el abrazo
de alguien que le quería.
Pero el hombre no lo vio...
El siguió trabajando y lo borró sin leerlo.
No te pierdas de una oración ni de un buen amigo(a)
porque la envoltura no es lo que tú esperas. . .
Dios nos habla a través de las personas
más sencillas y menos esperadas.
Este mensaje tiene instrucciones de que
se lo comparta a todo aquel a quien yo quiera
que Dios le de su bendición, y yo te escogí a ti.
Tú puedes hacer lo mismo y compartirselo a
quien tu quieras bendecir también.
Espera siempre lo inesperado.
¡¡¡Que Dios nos bendiga!
¡Que tengas un bello día!!!
Te quiero mucho, tu amigo:
Jesús